miércoles, 25 de junio de 2014

Los descarriados

Esta historia comienza al amanecer mientras corro por el carril bici de Alboraya. Como aún hay primavera más allá del Corte inglés durante esta época escucho el canto de del sapo partero. Más que un canto sostenido es una nota solitaria y breve pero tan profunda y melancólica que dan unas ganas enormes de desviarse del camino y acercarse a la fuente de esa música enloquecedora. Cambiando la siernas por sapos y el anchuroso mar por la acequia de la Patacona me pasa como a Ulises. Aunque como ignoro lo que cantaban las sirenas la única comparación que se me ocurre es con el sonido que emiten los semáforos para avisar a los ciegos. Comparación triste, sí, pero consuela pensar que inexacta porque el semáforo pita a intervalos regulares en cualquier estación del año y el canto del sapo es inesperado y además, si no eres sapa, cuando te acercas se calla. Lo mismo ahí está todas la diferencia: lo inesperado, lo que no va dirigido a ti, lo que pillas por el rabillo, en este caso del oído, sorprende y atrae. No es lo mismo fondearse junto al criadero de doradas de la Malvarrosa sabiendo de antemano que cada vez que cebes el anzuelo sacarás una pieza de tamaño y sabor Mercadona que esperar todo un verano y, ¡Ay!, a veces dos, a que una dorada salvaje te doble la caña. Decidle a un jugador que acertará todas las apuestas que haga y si no es un mezquino recalcitrante terminará por aburrirse del juego. Desviarse del camino a riesgo de perder a Penélope o no salirse nunca de la senda. Esa es la cuestión. Y quién sabe si entre el que nunca llega tarde a cenar y el aventurero Penélope prefiere que la cena se enfrie y ganamos la apuesta. Además de que, como es sabido, a veces los sapos se convierten en príncipes. Y un corolario: mejor correr sin cascos ni tapones de cera

 

domingo, 22 de junio de 2014

conducta ejemplar

Una vez muerto dios yo creo que nuestra felicidad se incrementaría notablemente si lleváramos una cámara de 24 horas conectada a cualquiera que tenga una buena opinión sobre nosotros.