jueves, 29 de diciembre de 2016

Animales míticos

Es una nimiedad, pero el caso es que había una mosca en la pantalla y la he espantado colocando el ratón en ese punto.
Lleva ya varios días mendigando en la puerta del Mercadona mientras habla solo. A mí me da mucha pena pero debe de dar más miedo aún porque nadie se acerca a socorrerle. 

domingo, 18 de diciembre de 2016

No me gusta el cole

Lo que antes era huerta y después fue solar ahora será ampliación del colegio Max Aub. Levantarán muros altos para enclaustrar a los niños en una burbuja educativa y nos birlarán un pedazo del barrio. De momento las excavadoras ya han arrancado los árboles que crecían sin permiso de la autoridad municipal. Todavía me acuerdo de cuando era la huerta más cercana a la Plaza del Ayuntamiento. Después expropiaron el terreno contra la voluntad de su dueño: un labrador que a la manera del jefe indio de Seattle, me decía, sin quitarse de la boca uno de esos caliqueños que ahora prohíben las autoridades sanitarias, que el no vendía su vida al al ayuntamiento. En fin, que no dudo de que sea un progreso para el barrio, pero para la Loba es una pésima noticia, casi tan mala como lo fue el ferrocarril para los bisontes americanos o los contenedores para los gatos. Apenas quedan ya espacios vacíos. Todo funciona, todo se aprovecha y eso me inquieta.




viernes, 16 de diciembre de 2016

Más tregua

Volviendo del último paseo con la Loba una pareja que se besaba junto al portal ha interrumpido su beso a fin de que ella se subiera al escalón de un escaparate y una vez equilibrados en estatura seguir besándose con la misma pasión pero más comodidad. Como me cuesta horrores no sacar conclusiones precipitadas de todo lo que veo le auguro una larga y feliz vida juntos. Así sea.

domingo, 4 de diciembre de 2016

Tregua

My subject is the soul
Difficult to talk about,
Since it is invisible
Silent and often absent.

Even when it shows itself
In the eyes of a child
Or a dog witthout a home,
I’m at a loss for words.
……………………


Mi tema es el alma
asunto difícil de tratar,
porque es invisible
silenciosa y, a menudo, ausente.

Incluso aunque se muestre
en los ojos de un niño
o un perro abandonado,
no encuentro las palabras.
                                      (Charles Simic)