sábado, 5 de noviembre de 2011

Teoremas del día


Como está nublado y cualquier elogio del paisaje será desmentido cuando salga el sol, Lobolucas se arriesga a correr las cortinas y ensimismarse en pensamientos metaliterarios, esos abismos inmutables, casi uterinos, donde uno puede ver liebres nadando y saludarlas sin mucho sobresalto por ninguna de las partes.

Llega a las siguientes conclusiones que pasa a enumerar:

I
Cuando escribe pensando en los lectores se pone de mal humor y se bloquea. El trabaja para la posteridad. Le gusta es ese diálogo del escritor consigo mismo donde yo siempre le da la razón a yo.

II
¿Qué es lo que hará un tonto con un lapicero para quererlo tanto?

III
¿Podría crecerle la nariz hasta el punto de poder describirla con tanto detalle que fuera innecesario descorrer las cortinas? ¿Compensará ser bizco de por vida con tal de tener tema de escritura?


Llegados aquí, sosa e insistente como la canción del verano, se instala en su cerebro la imagen de la cara de Mariano Rajoy. Abre las cortinas y pasa el resto del día llevando la cuenta de las hojas que caen en los árboles de enfrente con los ojos como platos.

3 comentarios:

  1. I. Vanidad, divino tesoro
    Ii. Chuparlo?
    III. Supongo que si te lleva a la posteridadvale la pena serlo

    Lobolucas, de vez en cuando cierra las cortinas

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  2. Curioso, mi yo nunca le da la razón al yo, y qué bien se lo pasan.
    Hablando de pasatiempos: como por mi ventana no se ven árboles las mariposas me pillaban más de cerca.

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  3. Parlant de teoremes, teniem un "company" a la facultat conegut pel nom de "el maletero" que va demostrar el teorema de funció inversa global, o siga tota funció té inversa sempre en tot el seu domini, i es va quedar tot satisfet, hehehehehehe. Els demès no ens ho podiem creure.

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