domingo, 31 de marzo de 2019

Benéfico instinto

Empleo casi diez minutos en acompañar a la ventana a una polilla que se había quedado atrapada entre la ropa destendida. Luego me pregunto si mi mano izquierda sabía lo que hacía mi mano derecha, si lo hice por salvarla o por salvarme. Algún pajarito inocente movido por el instinto se la comerá sin mayores cavilaciones.

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